Thin Lizzy – Renegade: 40 años de cuando la heroína y los sintetizadores atraparon a Phil Lynott

Ficha técnica

Publicado el 15 de noviembre de 1971
Discográfica: Vertigo Records
 
Componentes:
Phil Lynott - Voz, bajo
Scott Gorham - Guitarra
Snowy White - Guitarra
Brian Downey - Batería
Darren Wharton - Teclados

Temas

1. Angel of Death (6:18)
2. Renegade (6:09)
3. The Pressure Will Blow (3:47)
4. Leave this Town (3:50)
5. Hollywood (Down on Your Luck) (4:10)
6. No One Told Him (3:37)
7. Fats (4:04)
8. Mexican Blood (3:42)
9. Its Getting Dangerous (5:30)

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Para muchos y muchas de los fans de Thin Lizzy el Renegade es el peor de todos los que ofrecieron en su inmaculada trayectoria, y sí que supuso un bajón frente a su anterior y más inspirado Chinatown pero… en ningún momento creo que podamos hablar de un álbum flojo. Es ecléctico y diferente, especialmente a principio y final de disco, pero tiene sus momentos y aporta un par de clásicos más al grupo irlandés de rock duro.

Recordemos que en 1981 Phil y Scott estaban metidos en la heroína y que el gran líder andaba combinando discos de Lizzy con sus trabajos en solitario, algo que creaba el caos puesto que nunca sabían qué de lo que se grababa iba para un disco u otro. El grandioso baterista Brian Downey tenía pensado largarse y también estaba el ex de Pink Floyd Snowy White en el seno del grupo, y claro, él pagó los platos rotos. A pesar de ser un excelente guitarrista su actitud en directo quedaba muy alejada de los pendencieros que habían pasado por las filas de Lizzy. Haber tocado con Pink Floyd y Cliff Richard en tu currículum de verdad que choca como elección para un grupo de las características de Thin Lizzy.

A todo ello hay que sumarle el hecho de que Lynott apostaba por los teclados a todas todas. Midge Ure se había largado para alcanzar el éxito con Ultravox y Visage y un joven Darren Wharton (17 años) entraba en las filas del combo a pesar de que se olvidaron ponerlo en las fotos promocionales con la bandera roja. El problema de Renegade es que los teclados y sintetizadores son muy protagonistas, que los juegos de twin guitars apenas aparecen y que se empieza con dos temas largos y pausados. Están muy lejos de lo que esperamos de un grupo como Lizzy, pero para nada son temas menores.

Eh general las cosas no iban nada bien. Venían de perder dinero en una gira americana y tenían claro que no volverían por allí. U2 empezaban a hacerse un nombre y la NWOBHM hacía plantearle a Phil si eran l suficiente duros para encarar los 80 con garantías y no quedar desfasados. El productor Chris Tsangaridesle instó a postergar su segundo disco en solitario para que el caos y la confusión no se mezclaran entre ambas obras. Gorham y White odiaban cuando en los ensayos de Renegade Lynott decía de repente: “Vamos a tocar una de las mías”.

El disco

Para promocionar el disco se lanzó un sencillo bastante fallido como fue la versión de Billy Bremner “Trouble Boys”. Fue fallido hasta el punto que se decidió de que no apareciera en el disco. Llegó hasta el puesto número 53 en las listas, el mismo de el posterior single “Hollywood (Down on Your Luck)”. El disco funcionó realmente mal, cosechando unos resultados comparables al Fighting.

“Angel of Death” no es ese inicio trepidante que esperas… Oscuridad, profundidad y teclados con un inspirado Wharton y esa presencia dominante del bajo de Phil. Cadenciosa y trabajada, es de las que más presencia ha ido teniendo en los directos del grupo. Temática sobre Nostradamus tocando también el nazismo. Incluyen incluso voces distorsionadas en narración de profecías.

Otro tema que ha envejecido bien y que el grupo ha ido tocando de vez en cuando es el que da título al disco por mucho que sea un medio tiempo muy alejado de lo que le podemos suponer a Thin Lizzy. Hay arranques eléctricos y los juegos sempieternos entre las dos guitarras. Es la base rítmica, sin embargo, la auténtica protagonista de un corte cadencioso y diferente. Juegos de volúmenes, pausas y detalles técnicos en los que siempre se luce Downey.

Si vamos a lo mejor del disco hay que subrayar especialmente esa maravillosa “Hollywood (Down on Your Luck)”. Es el single definitivo y más representativo de la obra en la que en las letras te sepulta el sueño americano. Lo tiene todo para que sea un clásico y esos coros siguen siendo estelares junto a esa cadencia guitarrera tan Lizzy. El que luce de verdad en el disco es (otra vez, y como siempre) Downey, que sin tener tanto protagonismo va dejando su magia simplemente tocando el charles o la campanilla del ride.

Para la historia queda esa maravillosa aparición del grupo en un programa de sobremesa en el que una anciana de 70 años pidió cumplir un sueño al presentador Jimmy Saville: tocar con Thin Lizzy poniendo coros y marcándose un solo de teclado que había compuesto especialmente para ellos. Uno de los momentos más tiernos de los 80…

Una de las grandes joyas del disco es ese ejercicio tan deudor de ZZ Top como es “Leave this Town”. Gran composición, vacilona y desértica que va entrando y convenciendo con esos juegos tan precisos en los coros. White y Gorham se explayan con clase a las seis cuerdas turnándose en un solo que es pura clase. No se puede decir lo mismo de un “The Pressure Will Blow” que viene con solo de teclado incluso, amén del de guitarras. Están todas las características de los irlandeses y Phil a las voces es expresivo, pero… no despega en absoluto.

La trabajada melodía de “No One Told Him” nos acerca a lo que hacía Lynott en sus discos en solitario. Parece como si a última hora hubiese optado por quedarse con este corte para Lizzy, y está muy lograda. Gran línea vocal y efectivo estribillo, pero esos arreglos de teclados especiales te dejan algo frío. Y luego ya entramos en el terreno pantanoso en el que Phil se adentra en todo tipo de estilos y músicas como en “Fats”. Música negra con influencias del funk e incluso del jazz, aunque salen airosos del arriesgado cometido. Otra vez, para entenderlo, hay que mirar ese disco en solitario anterior. Aquí el que se sale es Wharton con su piano.

Si te dicen que “Mexican Blood” es de Thin Lizzy te va a costar. Otro interesante experimento fronterizo con juegos de coros, acústicas, percusiones sobreproducidas y aromas chicanos. Y finalmente hay la profética “It’s Getting Dangerous” (la cosa se pone fea)… Y no sabía Phil hasta que punto. Afortunadamente es una canción muy evocadora y lograda, aunque otra vez vuelve a pecar de melódica y queda lejos de sus clásicos.

Veredicto

No es un disco representativo de lo que son Thin Lizzy y es incluso tildado del “peor” de todos, pero qué queréis que os diga… Cuanto más lo escucho más me gusta y más me llega. Lynott tocaría fondo (también en lo musical) y daría un golpe de timón echando al pobre Snowy White y fichando al pirotécnico guitarrista John Sykes a la vez que abrazaba definitivamente el heavy metal sacando un colosal disco como es Thunder and Lightning.

De todas formas, en Renegade hay un trabajo exquisito de producción y el disco sigue sonando realmente bien a pesar de adentrarse en tantos estilos dispares. Incluso los teclados de Wharton siguen siendo de lo más destacado del disco. El grupo había tocado fondo y eso incluyó momentos tan tristes como el tener que mandar a Gorham para casa en plena gira por sus adicciones, que un portero diera una paliza a Downey o que se arrestara a Lynott por posesión de drogas y se hiciera pública su desgracia. El grupo parecía acabado.

Jordi Tàrrega
Sobre Jordi Tàrrega 1372 Artículos
Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.