Crónica y fotos del concierto de Thy Art Is Murder + After The Burial + Oceano + Justice For The Damned - Sala Razzmatazz 2 (Barcelona), 13 de octubre de 2017

Thy Art Is Murder dejan claro que son los «jefes»

Datos del Concierto

Bandas:
Thy Art Is Murder + After The Burial + Oceano + Justice For The Damned
 
Fecha: 13 de octubre de 2017
Lugar: Sala Razzmatazz 2 (Barcelona)
Promotora: Route Resurrection / Avocado Booking
Asistencia aproximada: 650 personas

Fotos

Fotos por Rubén de Haro

Nuestra Previa

Thy Art Is Murder – Dear Desolation

El hemisferio sur​ (o austral) es una de las divisiones geodésicas clásicas en que se divide el planeta Tierra. Corresponde a la mitad del globo terráqueo ubicada al sur de la línea del ecuador terrestre, que lo separa del hemisferio norte. Las estaciones

El pasado 13 de octubre, los héroes del deathcore mundial, los australianos Thy Art Is Murder, regresaron triunfalmente a Barcelona, un año más tarde de arrasar la Ciudad Condal junto a otros monstruos de la talla de Carnifex o Whitechapel, en el habitual Never Say Die!, que tendremos por aquí, un año más, dentro de muy poquito, y del cual os daremos debida cuenta en unas semanas. Somos así de majos.

La alineación de este año, las bandas que se subieron antes que ellos al escenario de la Sala Razzmatazz 2, fueron también un verdadero banger: Justice For The Damned, Oceano (maldito corrector, que siempre me pone el acento sobre la «e»; disculpad si se me ha escapado alguno más adelante…) y After The Burial. Veamos que dio de sí una de las giras más esperadas del año por parte de los más duros y cafres del lugar.

Justice For The Damned

La primera banda en reventar tímpanos fueron los también australianos Justice For The Damned. Aún habiendo comenzado a las 19:30, a pesar de esa tan temprana hora, la sala ya estaba bastante llena. La banda saltó sobre las tablas y escupió todo el hardcore que llevan dentro, con ese acento tan australiano y que tan buen resultado les está dando allá donde van. La audiencia, aunque nos costó un poco, no tardamos en ir al lío desde su primera canción, llamada «Deep Rotting Fear». Bobak, el cantante de la banda, parecía un poco estático al principio, pero rápidamente se hizo cargo de canalizar toda la energía de la audiencia y luchó hasta el final a base de uppercuts y jabs directos al mentón. Sin embargo, a pesar de la buena predisposición por parte de la audiencia, parecía que el respetable estaba ahorrando algo de energía para las bandas más grandes de la noche cosa, por otro lado, muy típica del publico barcelonés. Se formaron pequeños rings de boxeo, por eso de continuar con el símil pugilístico, a partir de la tercera canción, «Bearing The Crown Of Lies». La a veces falta de sincronización de los instrumentos de los miembros de la banda pareció no molestar a nadie, quizá debido a la falta de buen sonido de la sala; es Razz 2. Aún así, dieron un concierto bastante correcto, a base de guturales muy profundos y breakdowns matadores. Sus influencias hardcore también se manifestaron cuando instaron a la audiencia a hacer un circle pit. La noche prometía…

Setlist Justice For The Damned:

Deep Rotting Fear
No Flowers On Your Grave
Bearing The Crown Of Lies
It Will Always Be My Fault
Dragged Through The Dirt
Please Don’t Leave Me

Oceano

La siguiente banda en dejarse ver fue Oceano. No podemos decir mucho sobre su actuación, excepto que fue extremadamente increíble. Debido a que los de Chicago son una banda bastante grande dentro de la escena deathcore, la sala ya estaba casi llena para cuando empezó a sonar «Dead Planet», el primer trallazo de la velada. Interactuaron mucho con el público y eso hizo que el respetable se sintiera cómodo. Todos lo dieron todo cuando la banda anunció que iban a tocar viejas canciones para sus fans más fieles, para aquellos que han estado ahí desde el primer día. «Slaughtered Like Swine» fue claramente lo más destacado de su set, junto con «Dawn Of Descent», que cerró su actuación. La banda tocó a la perfección y su energía, y sobretodo los estratosféricos guturales de su vocalista; Adam Warren fue uno de los mejores frontmen de la noche. Él lo canta todo con su impresionante canal vocal y sus pig squeals tan característicos, reminiscencia de sus inicios grindcore. Su actuación fue una de los mejores de la noche, a pesar de que solo tocaron siete canciones.

Setlist Oceano:

Dead Planet
Viral Re-Animation
District Of Misery
Slaughtered Like Swine
Path to Extinction
Human Harvest
Dawn Of Descent

After The Burial

La siguiente banda, algo más conocida por la audiencia, fue After The Burial, que era la primera vez que nos visitaban. Eran, por así decirlo, la nota discordante de la velada, pues su estilo es mucho más técnico, más prog, que el del resto de las bandas que se engloban dentro del universo deathcore. Aún así, la audiencia lo dio todo, y los que pensaban que la sala ya había sido bombardeada por Oceano, estaban muy equivocados. Los de Minneapolis dieron todo un recital a base de riffs muy complejos y técnicos que claramente encandilaron al público. Sus clásicos solos de guitarra 100% metal también fueron de una calidad superior. Tuvieron mucha interacción con el público y nos animaron a conocer a la gente a nuestro alrededor. Lo más destacado de su set fueron sus canciones más conocidas «Lost In The Static», la primera de la noche, y «Collapse», que abre su exitoso último LP, Dig Deep (2016). Muy bien.

Setlist After The Burial:

Lost In The Static
Collapse
Anti-Pattern
Deluge
Berzerker
Aspiration
A Wolf Amongst Ravens

Thy Art Is Murder

La última banda fueron, por supuesto, los legendarios Thy Art Is Murder. Para cuando salieron al escenario, la atmósfera ya era muy buena. CJ McMahon salió a escena y nos sorprendió de inmediato con ese estatus suyo de «jefazo» total que le rodea siempre allá donde va… pero sin su legendario impermeable North Face; puntito negativo. Aun así, no le echaremos en cara que no trajera consigo su «marca registrada». Su set fue, obviamente, colosal y no faltaron «Shadow Of Eternal, «Coffin Dragger» o «Holy War». Pero tampoco faltaron temas más nuevos y recientes, como «Dear Desolation» o «Slaves Beyond Death» que, muy acertadamente, abrieron la velada. Lo más destacado de su set fue «The Son Of Misery», dedicada a sus primos que viven en Barcelona, y el momento estelada. Al inicio de uno de sus temas, hacia el ecuador de su actuación, McMahon apareció con dicha bandera al cuello que, seguidamente, colgó en una de las barras del escenario, acompañado de gritos de independencia por parte del público. Politiqueo aparte, hubieron, al igual que ha sucedido en otras ocasiones durante esta misma gira europea, interrupciones técnicas que, a menudo, no nos dejaban escuchar nada por unos segundos; pelillos a la mar. Hay que reconocer que los diferentes miembros de la banda hacen su trabajo como si fuera el trabajo más fácil del mundo, como sucede muy especialmente con su batería Lee Stanton, de los mejores y más rápidos dentro del gremio a nivel mundial. Otro hecho destacado fue que el cantante de Justice For The Damned apareció de repente en el escenario para aportar alguna que otra voz asesina junto a CJ. El mayor wall of death de la noche se lo llevó «Light Bearer», por cierto. Como broche final, un único bis: la majestuosa «Reign Of Darkness». Su actuación podría definirse con una sola palabra: hermosa.

Setlist Thy Art Is Murder:

Dear Desolation
Slaves Beyond Death
The Purest Strain Of Hate
Shadow Of Eternal Sin
Violent Reckoning
Emptiness
No Absolution
Coffin Dragger
Absolute Genocide
The Son Of Misery
Puppet Master
Holy War
Light Bearer
—–
Reign Of Darkness

Una velada de lo más interesante, la verdad. Guturales, riffs poderosos y carne, mucha carne puesta en el asador por parte de todos. ¡Excelente!

Rubén de Haro
Sobre Rubén de Haro 620 Artículos
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J'hayber.