Ya llevamos muchos días confinados en casa con nuestros profesionales sanitarios en primera línea de fuego y con unos tests que no les llegan, y que, posiblemente, no les vayan a llegar nunca. A los futbolistas y a sus familias sí, no tengáis duda alguna. Y ya vamos tarde pues España lidera el número más alto de sanitarios infectados a nivel mundial; pero más que salir a las ocho a dar palmas en agradecimiento sincero, quizá la sociedad debería recapacitar un poco y guardarse las ovaciones para las urnas, que es cuando toca decidir quién gestionará el futuro de nuestra sanidad pública.
Una de las pocas cosas buenas que sacaremos de esta crisis es que dudo que nadie se atreva más ya a tocar los presupuestos de sanidad, pero estamos en España, así que nos olvidaremos pronto de todo esto. Y mientras nuestros políticos improvisan rodeados de militares en las ruedas de prensa rezamos a Dio para que pronto pase esta pesadilla y que, cuando todo vuelva la normalidad, estemos (casi) todos aquí.
El mundo del heavy metal ha recurrido bastante a la figura de doctores y enfermeras. Sí, siempre doctor en masculino y enfermera en femenino, pero afortunadamente los tiempos van cambiando pues la realidad empuja fuerte. En esta profesión la paridad va en aumento. Casi siempre en las canciones metaleras sobre “sanidad”, los doctores, o son malos, o se dedican a tratar adicciones… o sus curas paliativas vienen de la entrepierna. Hay miles de canciones sobre sanitarios, pero he aquí cinco para homenajear un poco a quienes están en primera línea de fuego. Los y las reponedores/-as y diversos colectivos esenciales también merecen un top pero no son temáticas que el heavy metal haya tratado mucho.
«Doctor Doctor»
Artista: UFO
Álbum: Phenomenon (1974)
La inmortal canción de UFO lo tiene todo y más. Es el perfecto ejemplo de tema perfecto. Un jovencísimo Michael Schenker la escribió y es el clásico por antonomasia del grupo, especialmente potenciado porque Iron Maiden la usan para dar inicio a sus conciertos. Eligieron bien y Schenker encantado con ello, a pesar de que parece como si un poco al alemán se la resbalara bastante lo que hagan Maiden con su canción. Estribillo ejemplar y un riff de guitarra mejor incluso. La belleza de las guitarras dobladas y un Phil Mogg, que en esos tiempos cantaba como los ángeles, meten el resto a unos UFO que en esos tiempos estaban tocados por una varita mágica. Aquí tratan el mal de amores sin excesiva profundidad en las letras, per tanto da, estamos ante uno de los temas más perfectos de la historia del rock.
«Calling Doctor Love»
Artista: Kiss
Álbum: Rock and Roll Over (1976)
Los Kiss siempre han sido la cara festiva del rocky han presumido siempre de promiscuidad. Así que si llaman al doctor no será por desamor precisamente. Mr. Gene Simmons compone y canta esta pieza divertida y pegadiza en la que se auto-erige como el “Doctor Amor”, así que… nena, esto es lo que hay. “Me llaman el doctor amor y no eres la única que he tenido”… “El primer paso para tu curación es un beso así que ponte de rodillas”… Vale, Simmons no es Cyrano de Bergerac, no necesita balcones ni poesía, por lo cual, y como bien dice la letra: o lo tomas o lo dejas. El rock duro iba dirigido en su génesis a un público joven y masculino, botón de muestra esta canción. Los años pasan y su jeringuilla quizá esté ya como la garganta de Paul Stanley, pero que le quiten lo bailado. Otra cosa no, pero el dinero y el sexo han sido su vida, y para ello se ha servido de la música.
«Suite Sister Mary»
Artista: Queensrÿche
Álbum: Operation Mindcrime (1988)
La perfección hecha ópera rock lleva el nombre de Opertion: Mindcrime, y por mucho que Empire sea un disco excepcional much@s nos quedamos con esta obra maestra de principio a fin. En esta historia hay muchos doctores malvados pero el protagonista encuentra la curación en la hermana Mary. ¿Prostituta? ¿Monja? ¿Enfermera? La venda cae de los ojos del protagonista de la historia y el amor lo puede todo. No es que la hermana Mary termine muy bien luego, pero esta preciosa pieza monumental se va hasta los 10 minutos y es cantada por una inolvidable Pamela Moore, dando la réplica a un pletórico Geoff Tate que en esos tiempos no tenía rival como cantante. Qué lastima que ese gran cantante haya terminado girando con bandas de bar por mucho que sustituya a Michael Kiske en Avantasia. Este tema es monumental.
«I Don’t Need No Doctor»
Artista: W.A.S.P.
Álbum: Inside the Electric Circus (1986)
El tema es tan perfecto y les queda tan bien a W.A.S.P. que siempre nos olvidamos que fue compuesta por Nickolas Ashford, por mucho que también todo un Ray Charles le diera mucha cancha. Ashford hacía doblete con Valerie Simpson y de los 60 a los 90 se dedicaron a componer para los grandes de la música negra. Están en el prestigioso salón de la fama por méritos propios. Blackie Lawless se basó en la versión del genial pianista y la actualizó para convertirla en un clásico metálico para su repertorio. Eran los años en los que W.A.S.P. eran un espectáculo provocador y la frase de que “no necesitamos un doctor” les iba que ni pintada. Evidentemente, en las letras, el sólo hecho de ver a su “nena” ya hacía que no necesitaran de facultativo para sanar sus dolencias. Un tópico literario muy recurrente en la música. Hay otra versión habitual de W.A.S.P. que también versa sobre los doctores y no es otra que el “The Real Me” de The Who. Da que pensar que las dos versiones más tocadas en vivo en toda la historia de esta banda versen sobre doctores… Por cierto, esta última la encontramos en el disco The Headless Children. Para algunos (me incluyo) la obra maestra de esta banda.
«The Good Doctor»
Artista: Haken
Álbum: Vector (2018)
Servidor cayó en los pies de esta banda inglesa de metal progresivo cuando entonaron el canon polifónico de “Cockroach King” en un ya lejano Be Prog! en Barcelona. Mucho ha crecido este grupo, pero allá ya vimos que algo impresionante se cernía sobre nosotros. Que hayan conseguido el estatus deseado es muy buena señal. En 2018 indagaron un poco en las teorías freuduianas y el electro shock, algo que ha seducido a muchos grupos de rock, más como tortura que como sanación. El “Doctor Bueno” elige a un paciente que no se agita obre su cama como los otros y le da una buena dosis como le daban los Ramones en “Psycho Therapy” o como podemos ver en la extraordinaria película y libro “Alguien voló sobre el nido del Cuco”. Hay algo de Mengele incluso. Esta composición abría Vector con elegancia y percusiones ochenteras sampleadas. La voz de Ross Jennings es alucinante y el grupo roza un nivel excelso. ¿Serán los próximos herederos de Dream Theater?