Van Canto – To the Power of Eight

Van Canto son sin duda una de las bandas más singulares del panorama metalero actual. ¿A quién se le ocurre formar un grupo de heavy solamente con un batería y seis voces? Cuando los conocí, ya hará unos diez años, me engancharon enseguida con sus versiones de temas conocidos como «Fear of the Dark», «Battery» o «Rebellion». Sus canciones propias eran muy creativas e igual de pegadizas y las combinaciones de sus voces daban mucho juego. Con los años fueron lanzando una serie de muy buenos discos. De hecho, des del primer A Storm to Come (2006) hasta el Dawn of the Brave (2014), para mí ninguno baja del notable alto.

En 2016 lanzaban Voices of Fire, un trabajo conceptual muy ambicioso, pero que se aleja un poco de la línea que habían seguido hasta entonces. A pesar de tener algunos temas muy buenos, no acabó de cumplir las expectativas. En 2017, el vocalista principal Dennis «Sly» Schunke dejó la formación. Es de esas cosas que no acabas de valorar del todo hasta que las pierdes, pues en el siguiente álbum se demostró que su voz era imprescindible en el sonido de Van Canto. Trust in Rust (2018) resultó una decepción para muchos, con composiciones poco originales y letras poco trabajadas. Por si no fuera poco, Hagen Hirschmann sustituyó a Sly pero no acabó de encajar con el resto de la banda. A pesar de contar con diferentes registros vocales como el gutural, voz rasgada y melódica, parece que el puesto le quedaba grande.

Con este panorama llegamos al presente. Para alegría de muchos, en este To the Power of Eight vuelven a contar con Sly como vocalista invitado en todas las canciones, y no precisamente en un rol secundario. Sin embargo, oficialmente sigue sin formar parte de la banda ni actuar regularmente en los directos. En esta ocasión nos presentan una portada con tonos muy fríos y más elaborada que de costumbre, vamos a ver qué hay detrás:

Han elegido empezar con una intro que nos indica sus intenciones de volver a sus raíces. Estas se reafirman a medida que pasan las primeras canciones. Empiezan golpeando con la energética «Dead by the Night», una pista en la que pasan muchas cosas, pero que no me ha acabado de convencer por parecerse demasiado a temas anteriores y tener una letra algo facilona. A pesar de eso, está claro que el nivel ha subido desde Trust in Rust y que vamos a tener como mínimo un buen disco.

Con «Faith Focus Finish» y «Falling Down» sí que han conseguido engancharme. Tienen el espíritu de sus primeros trabajos pero sin copiarse a si mismos, ¡Vaya temazos!. Han conseguido muy buenas dinámicas entre las diferentes voces, parece que Inga Scharf está en mejor forma que nunca y ahora Hagen encaja mucho mejor en la mezcla. Stefan Schmidt sigue simulando solos de guitarra con su voz a través de un amplificador, y a cada entrega logra parecerse más al instrumento.

En esta ocasión han decidido incluir nada menos que cuatro versiones, de grupos y estilos bastante variados. La primera que nos encontramos y han usado como single es la bien elegida «Raise Your Horns» de los vikingos Amon Amarth. Hagen hace un buen trabajo con esos guturales, solo se echa en falta alguna voz melódica que los doble durante el estribillo, que pierde mucha potencia después de la primera frase. También tenemos un «Run to the Hills» con una Inga que toma el protagonismo y una batería con muchas filigranas. El clásico de Maiden ya está un poco manido, pero la versión en si no está nada mal.

Pero esperad, porque tenemos a Hagen de nuevo, esta vez intentando hacer de Brian Johnson en un «Thunderstruck» que no acaba de cuajar. Por suerte tenemos una final «I Want It All» tremenda. ¡Sly al rescate! Esta vez si que hacen honor a la versión original de Queen.

Entre todas estas covers tenemos algunos cortes originales más. Todos ellos son convincentes y sólidos. Tenemos una contundente «Heads Up High», una balada sin batería muy bien conseguida en «Turn Back Time», una rockera «Hardrock Padlock» con mucha energía y buen rollo y una buena actuación general en «From the End».

Van Canto se han sacado de la manga un álbum poderoso pero con algunos detalles a pulir. Sin duda les vuelve a poner en trayectoria ascendente respecto a su última entrega, habrá que ver como se las arreglan en directo sin la magia de Sly. Definitivamente, con este To the Power of Eight han conseguido desencallar el barco.

Aleix Besolí

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Me metí en esto del metal a los 14 años, y de concierto en concierto he ido descubriendo las bandas nacionales e internacionales que forman parte de este mundillo. Ahora aporto mi grano de arena a Science of Noise contando lo que pasa en los eventos de la zona y algunas novedades discográficas.

También toco la guitarra y el bajo en algunos grupos de la escena local. Tengo los huevos pelaos de tocar en el Ceferino.