Crónica y fotos del Granollers Metal Meltdown - Sala Nau B1 (Granollers), 30 de noviembre de 2019

Vita Imana lideran una intensa noche de metal y hardcore en Granollers

Datos del Concierto

Granollers Metal Meltdown

Bandas:
Vita Imana + Bellako + Blaze Out + Reset in May + Kararocker
 
Fecha: 30 de noviembre de 2019
Lugar: Sala Nau B1 (Granollers)
Promotora: Sala Nau B1 / Science of Noise
Asistencia aproximada: 300 personas

Fotos

Fotos por Manuel Damea

Como ya os hemos venido explicando estas últimas semanas con bastante insistencia (algunos pensaréis que incluso demasiada), el exitoso sold out que supuso la visita de Soziedad Alkoholika a principios de este año en Granollers pudo significar fácilmente un antes y un después en la vida rockera y metálica de una ciudad que ha distado bastante de ser una meca del estilo desde hace ya décadas. Hechos como éste o la aparición de iniciativas como la del Dràstik Punkaires (una pequeña sala / colectivo instalada en el más delicioso underground de comarcas y que por primera vez programa rock, punk y metal – aunque de este último un poco menos – de forma regular en la ciudad), han hecho que la gente vea como posible colocar la otrora (y aún largamente) durmiente capital del Vallès Oriental en el circuito guitarrero catalán.

Los del Dràstik tienen ya los huevos pelados de batallar por la escena, pero es de agradecer que la gente de la Nau B1, que es una sala de municipal muy grande (caben unas 800 personas), la mar de maja y algo infrautilizada dónde se hacen todos los conciertos más o menos grandes que pasan por la ciudad, haya visto clara la necesidad de diversificar su oferta más allá de las bandas que suelen petarlo en el circuito catalán. Y para llevar a cabo este encomiable cometido, han querido contar con nosotros (y más en concreto, conmigo) para que les eche una mano a la hora de configurar la mejor oferta rockera y metalera posible. Y como a buen gusto, clase y saber estar no nos gana (ni me gana) nadie, en nombre de la revista me lancé de cabeza a por una colaboración a la que le auguro un montón de cosas buenas y de momentos memorables tanto para nosotros como para el que tenga a bien pasarse por aquí.

Así que el primer eslabón de esta esperemos que larga y fértil relación tuvo lugar este pasado sábado 30 de noviembre. Para seros sincero, la idea original no era montar un mini festival así (hoy en día cuatro bandas ya son festival), sino que teníamos cerrado un nombre bastante grande que iba a ejercer de indiscutible cabeza de cartel junto a un telonero y gracias. Desgraciadamente, unas semanas más adelante  cancelaron porque, al parecer, tenían que participar en una cosa muy grande y muy ineludible ese mismo día en una ciudad mucho mayor. Al final nunca tuvimos más noticias de ese evento, que no llegó a celebrarse, pero la banda en cuestión (un pepinazo, os lo digo) ya nos la guardamos para el futuro.

Inasequibles al desaliento y con la idea entre ceja y ceja de cerrar un cartel variado, coherente y de calidad, movimos todos nuestros contactos y conseguimos, creo yo, un line up impecable y envidiable, liderado por unos pequeños históricos como son Vita Imana, con dos bandas catalanas brutales como Bellako y Blaze Out y con la oportunidad de escuchar a los locales Reset in May demostrar de lo que son capaces. Si a todo ello le añades el siempre divertido Kararocker, le plantas un nombre así potente al tinglado como el de Granollers Metal Meltdown y pones las entradas a diez euros (diez euros, tíos, eso es un regalo), pues te queda una propuesta de la que sentirse orgulloso.

Evidentemente, y aunque molan lo suyo, el poder de convocatoria de Vita Imana no es el de Soziedad Alkoholika, así que en esta ocasión nos tocó sufrir un poco para ver si la gente se animaba a venir o no. Porque a pesar de nuestra insistencia a nivel de promoción y de la ayuda de algún que otro medio (pocos, también hay que decirlo), nuestra limitada experiencia como promotores ocasionales nos dice que los jebis compran siempre a última hora, así que estuvimos un poco con los huevecillos por corbata hasta última hora. Para que os hagáis una idea, partimos de los 60 que habían comprado su boleto tan solo dos días antes del concierto (mamá miedo), pero acabamos reuniéndonos casi 300 en el mejor momento de la noche. ¿Podría haber ido mejor? Sí, podría. ¿Estamos satisfechos? Pues también, y sin duda. Todos sabemos que Granollers es, por ahora, una plaza complicada y que, como cada fin de semana en estas fechas, había muchísimas propuestas atractivas por toda la geografía catalana, así que no podemos sino aplaudir y dar las gracias a los tres centenares de valientes que nos escogieron a nosotros para pasar su sábado noche.

Reset in May

Los jóvenes Reset in May ejercieron con orgullo de representante local y de anfitriones de la velada, y la verdad es que, a pesar de sonar un poquillo apagados, no lo hicieron nada mal. Mentiríamos si dijéramos que la escena granollerense a nivel de bandas más agresivas es particularmente floreciente, pero estos chicos ya hace años que se han hecho un lugar y, poco a poco, tienen una presencia más activa en los escenarios catalanes. Personalmente, los había visto solo hace un par de años en esta misma sala durante el contexto de esa Nit de Llops que me descubrió la brutalidad de Arcanus en directo, y lo cierto es que si entonces me dejaron con la sensación de que aún les faltaban unas cuantas tablas, hoy vi a una banda mucho más compacta y con mucha más confianza sobre el escenario, manteniéndose activa y entretenida en todo momento.

Por culpa de unos pequeños problemas técnicos a nivel de puerta, la velada empezó un pelín más tarde de lo esperado, y el retraso en la apertura se comió una pequeña parte del concierto de Reset in May, que acabó reducido a seis canciones (pertenecientes a un futuro trabajo de debut aún no publicado), empaquetadas en unos breves 25 minutillos y que acabaron con su ex-guitarrista Ramon subido al escenario para interpretar la final «Hollow Heart» al lado de sus antes compañeros. Ante ellos se reunía ya una cantidad respetable de gente, diría que bastante teniendo en cuenta que eran los primeros teloneros, aunque también tengo que decir que siendo la banda local me sorprendió no encontrar una amplia claca de amigos que les jalearan con más fuerza desde las primeras filas. Sea como fuere, su metalcore / deathcore sirvió para calentar el ambiente antes de que salieran a escena las tres bandas grandes de la noche, y todo lo que oí sobre ellos a posteriori fueron buenas palabras.

Setlist Reset in May:

Humans
Paralyzed
Shadows
Haunted
The Left of Fire
Hollow Heart

Blaze Out

Los barceloneses Blaze Out ya son verdaderamente alguien en la escena catalana (y más allá), y todo lo que han conseguido hasta hoy lo han hecho a partir de trabajo, simpatía, perseverancia, calidad y gancho. De hecho, y a pesar de su posición como tercer nombre del cartel, me atrevería a decir que la banda liderada por un siempre simpático Gerard Rigau fue responsable de que muchos de los presentes se encontraran hoy aquí, ya que la cantidad de aficionados fieles y leales que arrastran suele ser (y es) bastante considerable (y de ello aviso a promotores varios en busca de bandas…). Y ellos, como siempre, estuvieron sobradamente a la altura de las expectativas con un concierto dinámico, entretenido y energético que sirvió para presentar su nuevo y celebrado álbum Instinct en tierras vallesanas, un disco cuyas canciones se mezclaron con total naturalidad con los mayores hits de sus dos trabajos anteriores.

Antes hablábamos de que había visto por primera vez a Reset in May en una Nit de Llops. Pues curiosamente puedo decir exactamente lo mismo sobre Blaze Out. Desde entonces he tenido la ocasión de encontrarme frente a frente con ellos en un buen puñado de ocasiones, pero la primera de ellas fue ahora casi tres años en esta misma sala. Y aunque esa noche ya ejercieron de cabeza de cartel y sabían muy bien lo que se hacían sobre las tablas, a día de hoy van bastante sobrados y me atrevería a decir que ya están listos para comerse cualquier escenario (tal y como ya hacen, de hecho y a menudo, en la mayoría de festivales nacionales de gran formato). La voz de Gerard en sus momentos limpios despierta habitualmente alguna reserva, pero a la que se pone a berrear demuestra ser pequeño pero matón. Sus duelos a la guitarra con David Lleonart sí que no admiten discusión, mientras que las habilidades de Carles Comas al bajo y de Josh a la batería (ojo con el chaval este que es una bestia) están más que fuera de toda duda.

La banda empezó su descarga con «No More Fear» y «Shining Blood», pero creo que no fue hasta que interpretaron la heavy y groovera «Fist Goes First» que la gente se empezó a calentar de verdad. A partir de ahí, y hasta el final, Blaze Out tuvieron al público comiendo de su mano y respondiendo sin pensárselo dos veces a sus peticiones de circle pits, de walls of death o de sentadas unánimes en plena pista. Ellos iban saltando de plataforma en plataforma y de micro en micro mientras descargaban con convicción y confianza temas tan pegadizos y con tanto groove como «Savage Blue», «Wrath Afire», «Toxic AF» o «S.I.N.S.», dejando para el final el gran pepinazo que es «Red Silence», aún hoy (y lo saben) la canción definitiva que han parido nunca esta gente. Su concierto fue todo un éxito y su presencia aquí generó una satisfacción plena todo el mundo: en el público por verlos y en nosotros por haber podido contar con ellos para la noche de hoy.

Setlist Blaze Out:

No More Fear
Shining Blood
Fist Goes First
Savage Blue
Wrath Afire
Toxic AF
S.I.N.S.
Attack on Titan
Red Silence

Vita Imana

Es posible que los madrileños Vita Imana no estén viviendo el nivel de popularidad que vivían hace cosa de 10 años, cuando eran los Sepultura / Machine Head españoles y parecía que iban a comerse el mundo a caballo de ese discazo que era Uluh. El metal alternativo, los timbales y muchos de los elementos que caracterizan su música han dejado de gozar del fervor del gran público, pero a ellos eso les ha dado igual (como debe ser) y han ido sacando discazos, ganándose más y más fans incondicionales y arrasando con los escenarios grandes y pequeños de toda la península. Así que cuando se nos pusieron a tiro como posibles cabezas de cartel no tuvimos ni la más mínima duda: Vita Imana tenían que estar en lo más alto de esta primera edición del Granollers Metal Meltdown.

Y lo cierto es que solo hizo falta estar presente unos minutos en su prueba de sonido para ver que no nos equivocábamos en absoluto. Ya allí, el sexteto madrileño sonaba como un puto cañón y desbordaba actitud a raudales, así que era de imaginar que a la hora de la verdad se iban a merendar el escenario con patatas. Los cambios de formación que han llevado a Mero Mero (de Cuernos de Chivo) y a Diego López a sustituir a dos miembros originales del peso del vocalista Javier Cardoso y el guitarrista Puppy (con lo difícil que es siempre eso) no parecen haber afectado en absoluto la capacidad ni compositiva ni escénica de una banda que siempre se ha caracterizado por ser una apisonadora sobre el escenario.

La carta de presentación de esta nueva formación, por cierto, ha sido el celebrado Bosa, publicado a principios de este año, y que lejos de ser un disco de mero (mero, jajaja) trámite, la banda ha abrazado con orgullo hasta el punto de darle un protagonismo mayúsculo en el repertorio de esta gira, con hasta siete (ocho si contamos la intro) de las 14 canciones que tocaron hoy pertenecientes a su tracklist. Independientemente de que estos temas encajen más o menos con la nueva voz (para mí encajaron todos), lo cierto es que en la totalidad de los 75 minutos que estuvieron sobre el escenario lograron generan un torbellino de intensidad sin recesos, parones ni piedad: la base rítmica es atronadora, los tambores de Miriam les dan una personalidad única, las guitarras son feroces y precisas como ellas solas y el amigo Mero Mero es un animal escénico de mucho cuidado.

Con un escenario decorado con un amplio telón posterior y dos plafones laterales que dieron mucho el pego, los madrileños saltaron a escena ante a una sala que presentaba un aspecto notable y que tenía muchas ganas de verlos bajo las notas de «Calima», la intro de su último trabajo. Rápidamente cayeron «No En Mi Nombre» y «Desfiguradas», sin duda dos de las canciones más celebradas (y, a mí juicio, también más logradas) de Bosa. Sorprendió que hubiera espacio para un par de cortes de Oceanidae, un disco que a mí me flipa (quizás, en su global, mi favorito de su carrera) pero que creía que tenían un pelín olvidado. Por suerte, tanto «Seis Almas» como, sobretodo, «Oxígeno», sonaron espectaculares y yo las disfruté como un enano.

El que sí que dejaron totalmente de lado fue EL M4L, no sé si por el hecho de ser un álbum conceptual cuyas canciones pierden un poco el sentido a la que las sacas de contexto o porque realmente creen que a día de hoy no les representa del todo. Entre temas nuevos como «¡Contraataque!», «El Mundo a mis pies», «El Duelo» o «Desdoblamiento», también hubo lugar para algunos clásicos de verdad: «Romper Con Todo» y «Animal» pusieron la sala absolutamente patas arriba (no en vano Uluh es su disco más reconocido y celebrado), mientras que los aún más primigenios «Paranoia» y «Gondwana» despertaron las pasiones de los aficionados más fieles y veteranos de la banda.

Para terminar un concierto impecable que se hizo notoriamente corto y que quiero creer que gustó mucho a todos aquellos que se acercaron hoy hasta aquí, escogieron el brutal tema que da título a su último trabajo y, cómo no, el corte más popular de su carrera: la genial e infalible «Un Nuevo Sol». Al son de ambas, tanto arriba como abajo del escenario se vertieron las últimas gotas de sudor que nos quedaban, dejándonos perfectamente satisfechos y exhaustos ante la tralla que se nos escupió durante esa hora larga que pudimos disfrutar de ellos. Porque aunque creo que Vita Imana no tienen exactamente la fama de ser una banda tan cañera (y por eso a veces los fans más extremos no acaban de abrazarlos), lo cierto es que de agresividad y contundencia no les falta ni un pelo. Bolazo el suyo.

Setlist Vita Imana:

Calima
No En Mi Nombre
Desfiguradas
Seis Almas
Romper con Todo
¡¡Contraataque!
Animal
Oxígeno
El Mundo a mis Pies
El Duelo
Desdoblamiento
Paranoia
Gondwana
Bosa
Un Nuevo Sol

Bellako

Con toda la intención (y creo que buen criterio), configuramos el cartel dándoles a Vita Imana la posibilidad de gozar de la hora punta y del mayor tiempo de actuación, mientras que los salvajes Bellako iban a ser los encargados de cerrar el cuarteto de conciertos de hoy con la intensidad, la energía, la agresividad y la violencia sónica que caracteriza su hardcore thrash. Porque la cantidad de odio y de rabia que los del Maresme son capaces de acumular y canalizar en tan solo 45 minutos sobre las tablas es algo digno de mención, y si lo que te gusta es dejarte las cervicales como si no hubiera un mañana, escupir bilis y vivir en un pogo constante, entonces se me ocurren pocas bandas mejores que ellos.

Por todo ello y porque su directo acostumbra a ser una locura, era evidente que su elección y su presencia hoy aquí iba a ser un éxito. Además, y eso ya más en lo personal, el ligero giro hacia el thrash que se han pegado en su último disco Demonios me convence plenamente, así que tenía muchas ganas de ver cómo defendían sobre el escenario (un hábitat que es la razón de ser de estos chicos) esos nuevos temas como «Trepanación» o «Siglo XXI» al lado de cortes más habituales como «En Nombre de la Muerte» o «Humo». A la hora de la verdad, lo cierto es que no hubo demasiadas diferencias entre unas y otras: en esos tres cuartos de hora que decimos, y fuera cuál fuera la canción a interpretar, el quinteto de Mataró se sacudió de un lado para otro constantemente en aparente anarquía pero sonando con la precisión y la contundencia de un puñetero trueno.

Aunque todos los componentes de la banda fueron plenamente partícipes del caos que se generó ahí arriba, creo que el bajista Xavi Payán merece especial mención con sus gritos y arengas constantes, sus contorsiones y sus subidas a manos de un público que sin duda era inferior al que había estado en Vita Imana pero que lo estaba gozando de lo lindo. Si hasta ahora los pogos habían sido ocasionales, con Bellako se convirtieron en la razón de ser del concierto, siendo capaces de generar y acumular un nivel de intensidad y agresividad que aún no habíamos visto hoy. Hacia la recta final de su descarga (creo que fue en «Siglo XXI», que por cierto me parece el gran temazo de su último disco), contaron con la presencia sobre el escenario de Gerard Rigau de Blaze Out encargándose del bajo y añadiendo un poco más de locura a la situación.

A pesar de contar con un tiempo de actuación realmente corto, la sensación al entrar en la recta final del concierto de los catalanes es que habíamos sido vapuleados sin piedad y, en realidad, no sabíamos si era posible aguantar muchos más puñetazos sónicos, violentas y quejosas soflamas y múltiples momentos de puro hedonismo cannábico y festivo. Tal y como dicen todo unos reyes del género como son los suecos Raised Fist, al concentrar tanta energía en un concierto no es necesario que nos vayamos más allá de los cuarenta o cincuenta minutos para vivirlo al máximo, y unos alumnos aventajados como son Bellako se lo han tomado al pie de la letra y quisieron dejarlo clarísimo hoy aquí. Para acabar, por supuesto, su himno «A Fallo» arrancó los últimos alientos de rabia entre la gente y puso el punto y final (¿es eso cierto?) a una velada bastante memorable.

Setlist Bellako:

Intro
Demonios
De Nuevo
Infected
Pollos Radiactivos
Trepanación
El Nieto
En Nombre de La Muerte
Humo
En Nombre
Siglo XXI
La Vida es Perra
Al Infierno
A Fallo

Kararocker

No sé si es culpa nuestra por no haberlo anunciado del todo bien o es que la gente pensaba que cualquier cosa que fuera a ocurrir tras los conciertos propiamente dichos iba a ser algo menor, pero el hecho es que la noche no había acabado aún. Y es que para poner el punto y final de verdad a la velada (algo que pasa – y probablemente pasará, si podemos – en todas nuestras fiestas), aún nos quedaba una hora larga de Kararocker, el karaoke de rock y metal que solemos encontrar cada mes en la sala Rocksound barcelonesa, en la Breakout de Sabadell y que también es habitual del Rock Fest BCN. Además, y aunque no suele prodigarse en su tierra mucho más allá de formar también parte del Minibeat infantil que se celebra anualmente en este mismo recinto de la Roca Umbert (que es la antigua fábrica que contiene la Nau B1), esta iniciativa y sus miembros son originarios de Granollers, así que su presencia hoy aquí se antojaba aún más obligada.

El hecho es que no sé si era porque ya llevábamos cinco horas de música a nuestras espaldas y la gente ya tenía suficiente, pero a la que acabaron Bellako hubo una pequeña desbandada de público que hizo que pasáramos los últimos minutos de la noche verdaderamente en familia, con momentos en los que casi había más gente sobre el escenario (cantando y haciendo deliciosamente el canelo – que de eso se trata), que abajo. Aunque no negaré que tal bajón final de asistencia fue un poquito una pena, tampoco evitó que todo el mundo que quiso involucrarse en esos momentos de gloria que siempre son el Kararocker lo diera absolutamente todo emulando a Metallica, a Judas, a Sepultura o lo que tocara. Así que, al final, la gente se lo pasó pipa con ellos, y de eso es de lo que se trata.

Como balance final, creo que esta primera colaboración entre Science of Noise y la Sala Nau B1 se puede tildar de éxito notable, con todo funcionando a la perfección a nivel logístico y con y las bandas bordándolo y sonando bien. Quizás con unas pocas decenas más de asistentes habríamos podido considerarlo una noche excelente, pero tampoco soy capaz de quejarme de meter 300 personas en un concierto bastante trallero y musicalmente para nada mediático en una ciudad como Granollers. De lo que sí que tengo algo más de queja es de, precisamente, la gente del propio Granollers. Me encontré a muchos conocidos durante el concierto, pero bien pocos eran locales. Chicos y chicas, nos podemos quejar que no hacen cosas en nuestra ciudad, pero si no vamos a las que hacen, creedme que lo dejarán de hacer otra vez. La escena rockera y metalera más o menos underground es muy bonita y muy colaborativa, pero a la vez es algo muy frágil que casi nunca mueve un duro. Así que los pocos (o muchos) que somos, debemos cuidarla para que crezca sana y fuerte.

Este mismo 10 de diciembre, la Nau B1 anuncia su nueva temporada, en la que habrá un par de colaboraciones más con nosotros que ya conoceréis en su momento y que seguro que os parecen excitantes. Porque Granollers ha llegado al circuito rockero y metalero con la firme intención de quedarse. ¿Vendrás algún día a vernos?

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Sobre Albert Vila 954 Artículos
Siempre me ha encantado escribir y siempre me ha encantado el rock, el metal y muchos más estilos. De hecho, me gustan tantos estilos y tantas bandas que he llegado a pensar que he perdido completamente el criterio, pero es que hay tanta buena música ahí fuera que es imposible no seguirse sorprendiendo día a día. Tengo una verborrea incontenible y me gusta inventarme palabras. Si habéis llegado hasta aquí, seguro que ya os habéis dado cuenta.