El trío de prog finés Von Hertzen Brothers, compuesto por los tres hermanos Mikko, Kie y Jonne, vuelven a la carga con nuevo disco de estudio, In Murmuration (2024), el noveno de su discografía y segundo bajo el auspicio de la discográfica Doing Being Music que crearon ellos mismos para la edición de su disco anterior. A punto de celebrar sus bodas de plata como formación, su notoriedad en su país natal, Finlandia, sigue intacta y ya van siete discos seguidos que han conseguido meter dentro del top 5 (de entre los cuáles, tres números uno). Junto a ellos encontramos en esta ocasión al batería Sami Kuoppamäki y a un nuevo integrante de nombre Markus Pajakkala, multi-instrumentista que, como veremos, complementa a la formación con los teclados y diversos instrumentos de viento, aportando nuevas sonoridades al combo.
Si su anterior trabajo, Red Alert in the Blue Forest (2022), estuvo dedicado a reflexionar en clave introspectiva sobre cuestiones de calado como son los problemas medioambientales y las pérdidas humanas repentinas, pensamientos surgidos de una forma natural tras un penoso período pandémico, In Murmuration nos trae de vuelta a unos Von Hertzen Brothers más en la línea de sus discos predecesores en los que la melancolía y los himnos de estadio se alternan para ofrecernos una mayor diversidad atmosférica y un enfoque más positivista sobre las cuestiones tratadas en este trabajo. Aunque clasificados dentro del crossover prog y/o progresivo emocional, Von Hertzen Brothers solían tener un punto comercial (e incluso divertido) que recuperan de nuevo en el disco que nos ocupa y que esperamos les sirva para que su notoriedad más allá de las fronteras de su tierra natal se dispare definitivamente.
Antes de dar inicio y con la idea de enmarcar la obra, vale la pena detenernos en su portada y su significado. En ella podemos ver a una bandada in murmuration, un grupo de estorninos realizando un movimiento grupal en el aire al caer la noche. Ellos simbolizan el comportamiento que debemos tener como seres humanos para poder tirar adelante en este complejo mundo en el que nos ha tocado vivir: manteniéndonos alerta ante los peligros que puedan surgir y apoyándonos los unos en los otros.
Nos adentramos en In Murmuration ahora sí con uno de esos temas comerciales a los que hemos hecho referencia antes, “The Relapse”, todo un maravilloso corte de apertura propio del más genuino rock de estadios. Su energía instantánea te atrapa desde su inicio, sumergiéndote en su dinámica animada y sus cuidadas líneas vocales, en las que no escatiman en coros ejecutados por los tres hermanos, trasmitiendo positivismo y diversión en altas dosis. La sorpresa viene de la mano de Markus Pajakkala, el comodín que hemos comentado al inicio que se sale con su aportación al saxo en esta ocasión, dinamizando al máximo ese final de infarto en que todos van a una en una especie de explosión controlada.
“A Good Life” sí nos recuerda a aquellos temas más intimistas del disco anterior, un medio tiempo con el que dejarse llevar y disfrutar de las delicadas melodías que nos han preparado para encandilarnos a modo de himno preciosista. Aquí abogan por resaltar esas líneas vocales tan marca de la casa por encima de la instrumentación, potenciando ese carácter hímnico del que hemos hablado.
Con “Starlings” volvemos a encontrarnos ante un trepidante ritmo en el que nos parece escuchar ciertas melodías de inspiración arábiga. Funcionando a toda velocidad, se resuelve en poco tiempo y aun basándose en un patrón usual, algunas pequeñas perlas se esconden en su interior. Ojito de nuevo con Markus Pajakkala, responsable de una de ellas, protagonizando un solo con sus instrumentos de viento. Su infalible estribillo, así como su endiablado ritmo, han hecho de él un corte ideal para presentarlo como primer sencillo del disco. En su hipnótico vídeo, sencillo pero efectivo, podrás ver el baile de los estorninos sobre el mar moviéndose in murmuration, tal y como nos indica el título del disco. Aprovechamos para comentar que la concienciación medioambiental de los hermanos Von Hertzen hace que éstos aprovechen la salida de sus discos para recaudar fondos para alguna causa benéfica relacionada con este tema. En esta ocasión, han preparado un calendario con el que recaudarlos para donarlos a la fundación Birdlife, una organización internacional encargada de la protección de las aves.
Seguimos explorando sencillos con la audición de “Ascension Day”, un nuevo himno que destila optimismo y buen rollo por todos los costados. Son los coros omnipresentes, doblando voces y alternándose con la principal las que hacen poderoso al tema en términos de comercialidad, resultando en un estilo cercano al power pop.
Para abordar la balada “Beneath the Silver Stars”, Von Hertzen Brothers se han hecho acompañar de la Budapest Art Orchestra, con lo que os podéis imaginar que lo que inicialmente debía ser una edulcorada y sencilla canción se ha transformado en algo mucho más elaborado gracias a una envolvente instrumentación orquestal de acompañamiento que llevan la emoción a otro nivel. La canción va de menos a más, añadiendo capas y capas de instrumentos en su devenir, dosificando su intensidad emocional de esta manera.
Nos encontramos ya en el ecuador del disco, iniciándolo con un divertido tema denominado “Tightrope Walker”, en el que destacan sobremanera la sección rítmica batería/bajo y en el que los juegos vocales al más puro estilo The Beatles nos muestran una nueva manera de hacer en su música. Hay mucha originalidad y contraste en este tema, y bien merece ser escuchado en más de una ocasión para apreciar su grandeza. Un must sin lugar a duda.
“The Change” se inicia por todo lo alto con la entonación de su estribillo en altos tonos, mostrándonos una vez más que la capacidad de saturarlo todo con coros (femeninos también en esta ocasión) juega en su beneficio para conseguir emotividad hímnica instantánea. Interesantes son todos los instrumentos no usuales que van apareciendo en el transcurso de este tema, te animo a que los identifiques tú mismo porque los hay en cantidad: desde un elegante piano, un saxo —que menudo solo se marca—, un hammond, un xilofón, una flauta travesera… una delicia para las orejas más exclusivas. Seguimos en racha en cuanto a originalidad se refiere.
“Separation” es esa pequeña pausa intimista que rompe con las dinámicas anteriores. Piano y voz tan solo para dar paso a un final inevitable que está a punto de llegar —el de este disfrutable disco—. Von Hertzen Brothers han dejado para el final los dos temas más largos del mismo, que van en la línea más progresiva emocional a la que nos tenían habituados y que tan bien saben bordar.
“Snowstorm” es el primero de ellos, una epopeya cocida a fuego lento que invita a dejarse llevar una tras otra vez para apreciar las elegantes melodías que lo lideran, y sí, vuelve a sonar a himno una vez más, glorioso e inmenso. Les ha quedado de diez.
Despedir la obra por todo lo alto es algo previsible que pueda suceder en un álbum de Von Hertzen Brothers y así lo han manifestado una vez más tirando de la Budapest Art Orchestra, que acompaña a Mikko en esta acústica canción de amor imposible llamada “Wait for Me”. Tiene toda la pinta de tratarse de un tema del todo personal con el que querer sanar alguna herida del pasado, pues parece salir de muy adentro.
Hemos llegado al final de estos tres cuartos de hora de la propuesta musical que los hermanos Von Hertzen nos han querido regalar en este 2024, un equilibrio casi perfecto entre sus himnos más rockeros de infalible gancho comercial (predominantes en la primera mitad del álbum) y sus temas más íntimos y emocionales situados casi en su totalidad en su segunda mitad. Resulta evidente que, tanto en una tesitura como en la otra, Von Hertzen Brothers se sienten cómodos y juegan desde la posición de privilegio de tener las lecciones aprendidas de antemano, pudiéndose dedicar de esta manera a cuidar con mimo los detalles. No hay tema sencillo aquí, aunque algunos lo puedan parecer en unas primeras escuchas; si rascamos en la superficie, afloran siempre detalles de calidad que hacen de esta banda algo realmente especial.
A mí me ganaron el corazón hace ya tiempo. How about you?
Aficionada a la música y los viajes, aunque no sabría decidir en qué orden. Cuando los combino, ¡lo más! Amante de aprender cosas de allá donde vaya, soy un poco la suma de los lugares que he visitado y las experiencias vividas. Daría la vuelta al mundo de concierto en concierto si de mi dependiera, pero las limitaciones terrenales me mantienen aquí y ahora, así que, ¡a sacarle el máximo partido!