Nuevos vientos en Wolves in the Throne Room. Al menos esto es lo que he podido captar en su esperado nuevo disco. Tras un consenso global de que la banda se había estancado en los últimos discos, finalmente nos topamos con una nueva versión. No se trata de un cambio de rumbo sino más bien una adaptación a los nuevos tiempos.
Sin duda, los norteamericanos son una de las bandas más importantes del movimiento black metal atmosférico con discos geniales como Diadem of 12 Stars (2006) y Two Hunters (2007). Pero tras estos discos, la banda usó el piloto automático gozando de un porvenir notable con sus dos siguientes trabajos. Pero entonces llegó Celestite (2014), un disco más cercano a Ulver que a su propio legado. Un disco demasiado atmosférico y demasiado lejano a la esencia blacker que les encumbró en la cima del subgénero.
Evidentemente, Celestite no cuajó ni en los antiguos ni en nuevos fans y la banda decidió volver atrás con Thrice Woven (2017). Un pasó atrás que no acabó de agradar y dejaba a la banda en un momento crítico. Cuatro años han necesitado para dar continuación a su carrera y regresan al fin con Primordial Arcana.
Lo primero que podemos ver aquí es que la banda ha apostado por la inmediatez. Lejos de las piezas épicas y largas de sus inicios, Primordial Arcana cuenta con hasta ocho cortes de duración media comprendida entre los 5-7 minutos. Solamente “Masters of Rain and Storm” supera el umbral de los 10 minutos.
Si haces una primera escucha superficial, parecerá que el disco sigue en el piloto automático. Pero no nos engañemos, Primordial Arcana rompe con varios elementos claves de la identidad de la banda. Las atmósferas, parte elemental de Wolves in the Throne Room, son ahora más calmados pero con igual oscuridad. Trabajos laboriosos forjados con calma y con una vertiente más folk. La dureza incluso más doom toma la delantera en detrimento de la violencia blacker.
Quizás para muchos fans la banda ha perdido aquí parte de su esencia. El disco es más humilde que las anteriores epopeyas sonoras. También puede haber quejas en la producción, quizás demasiado nítida para una banda de su característica.
Lo que si podemos afirmar es que el procesado de Primordial Arcana por parte del oyente es más ligero. Pero el resultado final es igual de satisfactorio que cuando estás reproduciendo alguno de sus discos clásicos. La esencia black metal sigue siendo el portento de una banda que ha sabido resurgir de su propio espiral de destrucción que les llevó prácticamente al olvido por parte de la comunidad extrema. Con este nuevo disco, Wolves in the Throne Room encauzan su carrera y abren la puerta a una nueva vida presumiblemente muy interesante como su anterior etapa.